Las redes sociales se han convertido en un auténtico fenómeno social que además está suponiendo un cambio de paradigma que afecta tanto a candidatos en búsqueda de empleo como a reclutadores que desean atraer el mejor talento disponible. Sin embargo, esas redes en las que ambos se dan 'cita', aún siguen infrautilizándose, perdiendo gran parte de los beneficios que podrían obtenerse.
Fuente CC: Jordi |
No estoy hablando del 'qué', sino del 'cómo'. La evolución de los procesos de reclutamiento gracias la incorporación de la tecnología, ha cambiado radicalmente la forma en que se conectaban candidatos y reclutadores. Pero si lo miramos fríamente esta conexión tampoco ha evolucionado demasiado, ya que lo que básicamente se ha mejorado ha sido la agilidad en el proceso gracias a la incorporación de las plataformas on-line, que permiten un contacto rápido mediante el CV. La aparición de las redes sociales, especialmente aquellas que tienen un foco eminentemente profesional (LinkedIn, Xing), supone un paso decisivo hacia el cambio de comportamientos tanto de candidatos como de reclutadores, y que deberían tender hacia la creación de relaciones mucho más avanzadas que el mero contacto temporal y caduco que supone el envío de un CV.
Y esto, aunque ya se viene dando desde hace algún tiempo, aún le queda un largo recorrido, seguramente porque aún estamos un poco 'verdes' en el uso eficiente de dichas redes. Sigo comprobando que LinkedIn se sigue usando como si fuera un portal de empleo, cuando realmente no lo es. Tanto candidatos como reclutadores encuentran en esas redes sociales una nueva plataforma, adicional a los clásicos portales de empleo, donde poder inscribirse en ofertas de empleo (candidatos) o publicarlas (reclutadores). Es por ello que se están infrautilizando sus posibilidades reales basadas en el networking y en la generación de relaciones.
Sé que no es fácil. Han sido muchos años donde la relación entre reclutadores y candidatos no ha sido posible, y donde el único mecanismo de contacto de ambos ha estado ligado a la inscripción puntual en ofertas mediante el envío del CV. Ahora disponemos de la tecnología social que posibilita el contacto entre ambos, y además tanto candidatos como reclutadores se encuentran en el mismo lugar virtual. 'Sólo' debemos empezar a cambiar el chip y convertir a esas redes en un auténtico espacio de generación de contactos y relaciones.
Hasta mañana.
4 comentarios:
Poco a poco Miguel, con profesionales como tú, se irá haciendo pedagogía y la relación seleccionador/candidato será otra más cercana y colaborativa.
Saludos ;-)
Cèlia Hil
Gracias Cèlia por volver por aquí, y por dejar tu comentario. Y gracias por el piropo! 8:)
Efectivamente Miguel Ángel, la llegada de las redes sociales están suponiendo grandes cambios culturales, sociales y tecnológicos, que están afectando a las Personas y Organizaciones, así como a los Candidatos y Reclutadores.
Y como todo cambio de estas características va a necesitar tiempo, mucho tiempo... pero confiemos en que pronto, muy pronto seamos todos capaces de establecer relaciones e ir más allá y como tú dices, cambiar el chip.
¡Yo lo estoy deseando!
María Jesús Márquez
Gracias María Jesús por tu comentario y bienvenida al blog! 8:)
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