A menudo la edad es la excusa perfecta para justificar nuestra falta de resultados, lo que a su vez nos limita enormemente en nuestra capacidad para lograr lo que deseamos, especialmente en la búsqueda de empleo.
Fuente CC: desnivel com |
Para escribir esta entrada me he inspirado en el artículo '¿Sabes cuántos años tienes realmente?' de Gustavo Higueras que me ha gustado mucho, y que a su vez me mencionaba. Es mejor leerlo para que yo no haga un mal resumen.
Es muy curioso lo que se aprende al escribir en un blog, y recibir comentarios de personas tan distintas, tanto personal como profesionalmente. Me fijo especialmente en la actitud que se adivina tras sus comentarios (de ahí, la 'importancia de expresar nuestra propia opinión'), puesto que no dejan degenerar una percepción en cualquiera que pueda leerlos). Y me parece muy esclarecedor la gran variedad de caracteres que se esconden detrás de cada lector que decide exponerse en público y dejar constancia de su parecer sobre un debate determinado.
Concretamente, cada vez que he tocado una cuestión tan sensible como es la edad y su relación con la búsqueda de empleo (p.e. 'Los mayores de 45 años, ¿es imposible que encuentren trabajo?' o incluso '¿es la edad una pega para hacer marca personal?'), cada opinión esconde actitudes distintas frente al mismo problema; mientras unos encaran con valentía la búsqueda de trabajo a pesar de las negativas y de las mayores dificultades de encontrarlo con el paso de los años, otros muestran una negatividad manifiesta que contagia y transmite ideas pesimistas. Y esto último es precisamente lo que no necesita nadie. Ninguno de nosotros queremos rodearnos de mensajes negativos y experiencias (por muy reales que puedan parecer) que nos metan miedos y tratan de expandir una negatividad como si de un virus se tratase. Y muy importante, esto no es un mundo feliz donde pretendemos anestesiarnos a base de un optimismo a toda prueba, sino más bien donde el continuar adelante exige una clara motivación que lograremos mediante un optimismo coherente basado en nuestro esfuerzo.
Y ese interesante artículo que menciono de Gustavo, me hace reflexionar sobre la subjetividad de la edad, y cómo las personas abordan el paso del tiempo de maneras tan distintas. Me viene a la memoria una noticia que vi no hace mucho tiempo; se trataba de un hombre de unos 75 años (rondaba más o menos esa edad) que había dedicado toda su vida a la montaña. Vivía por y para ella. Y ahora, ni corto ni perezoso, decía que se encontraba en pleno proyecto para ascender los principales ocho miles del mundo; curiosamente, asumía que el paso de los años no pasaba en balde y que, aunque le gustaría hacer otras cosas, ahora su cuerpo lo tenía preparado para subir dichas montañas...
Tengo que reconocer que siempre he sentido una especial debilidad junto con la mayor admiración, por todas aquellas personas que son capaces de hacer algo que los demás no pueden hacer. O mejor dicho, en la mayoría de las ocasiones, que no están dispuestas a hacer. Y eso probablemente no es tanto por limitaciones físicas, sino especialmente porque se dejan 'morir' poco a poco, perdiendo paulatinamente la ilusión. Además, la sociedad en la que vivimos asume que a determinadas edades, uno tiene que hacer lo que se supone que debe... Es decir, un 'ancianito' de 75 años tiene que relajarse y disfrutar la vida sosegadamente, empezar a pensar en una residencia que le puedan cuidar, ...; también se dice a menudo (en este blog hay comentarios de este calado) que una persona por encima de los 45 años es prácticamente imposible que pueda encontrar un empleo...
Por tanto, y llevo ya varios artículos hablando sobre esta idea, lo que diferencia a unos de otros es precisamente la actitud con la que encaran los problemas. Gestionarlos adecuadamente y verlos con la suficiente perspectiva y claridad, a menudo puede suponer la diferencia que marca nuestro futuro. Es esa actitud la que condiciona lo que queremos hacer ahora y cuando tengamos 75 años (ó 65, ó 55, ...), viendo el desempleo como una oportunidad de mejora o como una desgracia.
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Hasta mañana.
15 comentarios:
Hola Miguel Ángel,
Tienes razón, yo tengo en mi DNI 49 años, un cuerpo de 40 y una mente para trabajar de 30.
Para mí estoy en un momento estupendo para trabajar porque tengo una elevada experiencia que me han aportado tantos años trabajando y mucha aptitudes que he ido adquiriendo a lo largo de mi trayectoria y tengo la misma ilusión para trabajar que cuando comencé. Yo si creo que voy a conseguir un empleo, pero es verdad que estamos rodeados de personas que te insisten constantemente que con nuestra edad es totalmente imposible conseguirlo. Yo pienso demostrar que no es así y que sí se puede y aunque tarde un poco más y me sea un poquito más complicado al final lo lograré.
Un saludo!
Yo también creo que hoy estoy mejor preparada que hace diez años, y sigo estudiando para lo que vendrá. Mi autodefinición es cierta, Babyboomer 2.0, y cuando sea preciso y real, cambio el 2 por el 3. Los limitantes que se queden en casa bajo la manta, que yo seguiré mi camino. Que tengáis un buen día.
¡¡Vaya sorpresa, muchas gracias Miguel Ángel!! Ayer estuve en un acto en el que se trato el tema de la búsqueda de empleo para vetera@s y se reconoció, por parte de responsables de RRHH, que existe discriminación hacia nosotros y según ellos, el motivo es porque la edad nos resta actitud pero esta es la idea generalizada; uno de estos responsables matizo lo que expuso, diciendo que en su ultimo proceso de selección había contratado a 3 personas de 50 años, es decir: si dejamos de insistir les damos la razón y si continuamos con la "pelea" se la quitamos, yo opto por "la pelea". Saludos.
Miguel Angel:Como muy bien dices,la edad no es excusa para que sigamos luchando por conseguir un trabajo digno,con el que podamos sentirnos bien y aportemos nuestro granito de arena a la Sociedad.
Por muy negro que nos pongan nuestro futuro,no debemos caer en la tentación de tirar la toalla y dejar que el mundo nos devore.
Yo,al igual que muchos compatriotas,estoy dispuesto a luchar para conseguir tener una vida digna.Resistiré.......
Ya comenté el otro día en otra de tus entradas: con 46 años en el DNI, porque mentalmente me olvido de ellos ya que sólo cuenta la energía, la ilusión, y las ganas de seguir aprendiendo, la pasión en hacer las cosas bien...
Es cuestión de tiempo, no de edad.
Muy interesante ver los comentarios, además de la entrada. Creo que es necesario dar visibilidad a estas actitudes, porque posiblemente animen a todos aquellos pesimistas a replantearse sus conceptos y enfocar el "problema" de otra manera. Por mi parte, en muchos debates de este tipo veo que la responsabilidad se pone siempre en el seleccionador, que tiene prejuicios o no tiene en cuenta a la gente de a partir de una determinada edad. Esto lo que provoca es desánimo, ansiedad y puede llevar al bloqueo. Me encanta lo que leo de Mari Paz, Gustavo, José, Ana y Marina y con esa actitud no dudo en ningún momento que conseguirán su objetivo.
Desde el punto de vista de la empresa, creo sinceramente que se pierde valor si de verdad la edad es un motivo de descarte. Yo, por mi parte, evito mirar la fecha de nacimiento de los candidatos y me centro más en como afrontan el proceso, su CV, sus capacidades... para evitar crearme sesgos que inconscientemente me pueden surgir . Por otro lado, habituados al uso de las redes sociales y utilizando las nuevas tecnologías como herramienta en la búsqueda de empleo, filtrando toda la información que estas aportan cuentan con una ventaja muy importante para enfocar los esfuerzos, ya que por ejemplo en Linkedin pueden ver qué determinados tipos de perfiles trabajan en las empresas, qué empresas están incorporando o cuentan con qué gente en sus procesos de selección... información que podría servir para orientarse a las empresas en las que piensen que pueden encajar mejor o en las que cuenten con más posibilidades.
Hay mucho más por decir, pero como siempre, me paso...
Saludos
MAD
Hola Marina, gracias por ese soplo de energía positiva que nos transmites. Ese empuje que demuestras te hará alcanzar tus propósitos.
Suerte, y cuando lo encuentres no te olvides de comentarnos la buena noticia!.
Hola Mary Paz, gracias por tu comentario. Ya de por sí, el que continua estudiando a pesar del paso de los años, demuestra una actitud inquieta que a mi me encanta.
Hola Gustavo, ha sido un placer mencionarte, tu artículo lo encontré muy adecuado. Es una lástima que haya reclutadores con la idea que comentas...
Hola Jose, gracias por tu comentario y bienvenido al blog. La edad es una realidad que hay que gestionarla con firmeza y adaptándonos a la realidad que nos rodea, y nunca presentarla como una excusa para no poder hacer cosas que debemos hacer ahora, más que nunca.
Hola Ana, gracias otra vez por tu comentario. La edad nunca debe ser un obstáculo para perder esa energía e ilusión de la que hablas, al contrario...
Hola de nuevo MAD. Te agradezco que hayas dejado tu comentario en esta entrada, que genera mucha sensibilidad como bien puedes ver. Especialmente, porque aportas tu experiencia como reclutador, y el valor que le das a la persona, más por sus capacidades profesionales y nivel de aportación de valor, más que por su edad.
Vuelve cuando quieras.
Hola de nuevo MAD. Te agradezco que hayas dejado tu comentario en esta entrada, que genera mucha sensibilidad como bien puedes ver. Especialmente, porque aportas tu experiencia como reclutador, y el valor que le das a la persona, más por sus capacidades profesionales y nivel de aportación de valor, más que por su edad.
Vuelve cuando quieras.
Grande grande grande
Acabo de cumplir los 48 y un año en paro y no decaigo,soy una joven de espíritu que me como el mundo.
No decaigo,es más después de 20 años en una misma empresa sigo pensando ,que puedo aportar mucho y bueno.
Me ha gustado muchísimo
Enhorabuena
Hola Begoña, muchas gracias por tu comentario y tu positivismo. Tus más de 20 años de experiencia laboral (al menos...) significan mucho, especialmente si vienen acompañados de ese empuje que demuestras.
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