A menudo me da la impresión de que esto de la marca personal es algo intangible que se encuentra fuera del alcance de la mayoría de las personas. En todo caso, veo que tiene una cierta compresión cuando se trata de personas famosas, pero para el resto de los 'mortales', no se suele tener una idea clara acerca de qué es ni para qué sirve. Esto no es en sí grave, pero sí lo es el ir proyectando a nuestro alrededor nuestras creencias, valores y comportamientos, sin ser conscientes de que ello, nos guste o no, genera respuestas en todas aquellas personas con las que nos relacionamos.
Fuente CC: Josu |
Probablemente, la palabra 'consciente' sea una de las que más he usado en este blog, y no precisamente por capricho. Creo que la consciencia es la capa que une lo intangible y volátil como puede ser un concepto a menudo arduo como la 'marca personal', con la realidad de las percepciones que originamos con nuestros actos. Esas sensaciones que vamos provocando con nuestro paso por el mundo presencial o virtual (da lo mismo, porque ambos mantienen vínculos claros), no son banales; al contrario, son precisamente las que originan todas aquellas decisiones que toman los demás y que pueden afectarnos directa o indirectamente.
Esa consciencia (y coherencia) que aplicamos sobre las acciones que pueden incidir en el posicionamiento de nuestra marca personal, es la que nos permitirá con el tiempo el ir convirtiéndonos en profesionales de referencia con una imagen clara sobre cuál es nuestra propuesta de valor.
Si nos limitamos a convertirnos en meros navegantes que se limitan a difundir a diestro y siniestro mensajes ambiguos que rozan el spam, sin tener ningún propósito firme sobre cuál es el objetivo que perseguimos, corremos el riesgo de generar una marca distorsionada que no tiene nada que ver con lo que realmente somos (y queremos ser) como profesionales. Porque, y esto es importante, hagamos lo que hagamos, ello incide sobre la imagen que de nosotros se tiene. Por tanto, siempre será mejor actuar conscientemente para tratar de orientar en la media de lo posible, las percepciones que los demás puedan tener sobre cada uno de nosotros.
Aprovecho para desearte las mejores fiestas que puedas disfrutar, y que el año 2.014 venga cargado de muchas ilusiones y sobre todo de nuevos proyectos profesionales.
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Hasta mañana.
3 comentarios:
¡¡Buenos días Miguel Ángel!! La verdad es que es muy difícil saber que transmites pero bueno, al menos que lo que se haga sea con la mejor intención y sin hacer daño conscientemente, te deseo lo mejor y quiero agradecerte todo lo que me has ido enseñando con tu trabajo ¡¡Feliz NaVIDAd!!
Hola Gustavo, como siempre gracias por tu fidelidad. No sabes lo que me alegra que te haya podido ayudar en algo.
Te deseo unas felices fiestas y un 2.014 mejor que el 2.013. Un abrazo.
Me gusta el matiz y estoy de acuerdo con él: no era consciente y serlo fue el punto de partida y el comienzo de la gestión de mi marca. ¡Felices fiestas!
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