Nuestra marca personal no debe ser un islote solitario perdido en la inmensidad del océano y desconectado del mundo. Es preciso convertirla en un ente lo más tangible posible, para lo cual es esencial el impulsar todos los canales posibles que permitan su interacción con el exterior, y así ir creando con el tiempo las suficientes percepciones sobre nuestra propuesta de valor.
Fuente CC: verlaciudad |
A menudo escribo en este blog sobre la importancia de integrar nuestra marca personal en el entorno tanto off-line como on-line, dejando una huella visible que se pueda rastrear fácilmente. Y para ello, la generación de contenidos adaptados a nuestros propósitos y al público objetivo que nos dirigimos, nos facilita la labor de llegada de nuestros mensajes. Ahora bien, no deberíamos limitarnos a lanzar contenidos como si fuéramos un mero medio de comunicación a la antigua usanza (es decir, en una única dirección), sino que debemos establecer mecanismos que permitan la bidireccionalidad, es decir, asumir que esos contenidos que podamos producir, generan interpretaciones y posibilitan el feedback de nuestra comunidad.
Es precisamente ese intercambio de información y pareceres, la que engrandece realmente nuestra comunidad. Porque los contenidos de por sí solos no bastan; por supuesto que nos pueden convertir en referentes en nuestra área temática, pero lo que busca realmente todo aquel que los consume, es tener la posibilidad de expresar su propia opinión. Por ello, es esencial buscar cualquier mecanismo que posibilite la interacción y el intercambio de información.
Porque con los contenidos nos mostramos y exponemos a los demás cuál es nuestro 'expertise' en un tema concreto. Nos sirven para sentar las bases de nuestro conocimiento y, de paso, gestionar las expectativas de los demás en cuanto a lo que se pueden esperar de nosotros. Pero es la interacción con la comunidad la que facilita la proyección de la marca personal, apuntalando la imagen de nuestra identidad profesional y otorgándola la suficiente dinamicidad. Porque la comunidad de seguidores no desea (al menos una gran mayoría) que nos convirtamos en una 'revista digital' que se limita a generar informaciones y opiniones de las que nutrirse, sino que quiere relacionarse con nosotros, expresando su opinión sobre las materias que se puedan tratar.
Veo imprescindible que no perdamos una sola oportunidad para interaccionar con la comunidad a la que nos dirigimos. Cualquier momento y lugar será bueno, puesto que cada ocasión será propicia para sembrar una semilla que genere percepciones de valor hacia nuestra marca personal. Y esas oportunidades están tanto en el mundo off-line (formaciones, conferencias, desvirtualización de contactos, ...) como en el on-line (blog, redes sociales y profesionales, ...).
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Hasta mañana.
1 comentario:
Cuanta razón tienes Miguel Ángel, la principal diferencia del ser humano es la comunicación (aunque hay animales que también se comunican), y por supuesto la interacción y el compartir las vivencias, los éxitos y los fracasos.
Sin embargo, parece que sólo nos interesa el saber, leer muchos blogs de gente influyente para intentar aprender de los mismos, por ejemplo.
Estoy contigo en que lo mejor para potenciar nuestra propia marca personal, es la interacción.
Un saludo.
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