La importancia de escribir en un blog para mejorar nuestra marca personal

Recientemente he leído la entrada 'If you're serious about ideas, get serious about blogging' ('si eres serio con las ideas, sé serio con el blogging'), donde nos hablan de la importancia de escribir para posicionarse y diferenciarse del resto, dándole forma a las ideas propias.

Internet nos facilita muchas posibilidades para que cualquiera que quiera encontrar empleo y/o posicionarse como 'experto' en su mercado de referencia, pueda hacerlo de la mejor forma posible. Para ello, existen multitud de acciones que el candidato en búsqueda de empleo (o alguien que ya lo tenga) puede realizar para mejorar su marca profesional; la mayoría de ellas pasan por generar contenido en blogs, redes sociales y/o profesionales, presentaciones, ...

Y es precisamente en los blogs donde me quiero centrar hoy. Su número se ha ido incrementando con el paso de los años, hasta superar ampliamente los 180 millones de blogs en el mundo. Sin embargo, a pesar de la creciente popularidad de estas herramientas, también es cierto que el tiempo medio de 'vida' de los blogs suele estar en un año, tras lo cual pasan a estar inactivos por abandono del blogger, por diferentes razones.

Considero que hoy en día, un blog es una de las principales herramientas (por no decir la primera) mediante la cual podemos convertir nuestros conocimientos en contenidos, y para ello no necesitamos ningún tipo de inversión (más allá de nuestro tiempo), puesto que los principales servicios son completamente gratuitos (Blogger, Wordpress).

Me gustaría poner 'los pies sobre la tierra', y explicar mi visión sobre lo que significa tener un blog y para qué vale. Aquí van algunas ideas:

• No sirve para encontrar empleo (por lo menos de forma directa); yo más bien asociaría sus principales beneficios a la generación y evolución de nuestra marca personal y profesional. Una persona con una imagen consistente que lleva tiempo cuidando y fortaleciendo, si mantiene un blog 'sólido' puede encontrar oportunidades (véase el caso de Carlos Bravo).
• Entre tanto blog existente, el hacerse ver y diferenciarse con una imagen de éxito, lleva mucho tiempo. No existen recetas mágicas (si alguien la conoce por favor que me la diga); los casos de éxito (véase el caso de Enrique Dans en este vídeo) que conozco se basan en un trabajo diario que a muchos les asustaría, y que por supuesto les echa para atrás.
• El escribir nos obliga a estructurar nuestros pensamientos y a darlos forma, forzándonos a profundizar en ellos y reorientarlos hasta dar con la forma final. Esto nos hace tener mayores conocimientos y con una mayor profundidad, lo que ayuda sin duda a ser mejores profesionales (y consiguientemente a demostrarlos frente a terceros).

Por otra parte, existen una serie de puntos que deberíamos tener en cuenta a la hora de abordar la creación de un blog que impacte positivamente sobre nuestra marca personal, y tener las máximas garantías para continuar y no abandonar pasados unos meses:

• Qué quiero conseguir. ¿Quiero posicionarme como un experto en una materia concreta?, ¿quiero encontar empleo?, ...
• ¿Sobre qué voy a escribir?. Elegir el tema es fundamental. Lo lógico es partir de un tema que se domina o, como mínimo, del que tenemos un cierto conocimiento y sabemos que llegaremos a convertirnos en 'expertos'.
• ¿Cuánto tiempo le voy a dedicar?. Pregunta importante, porque generar contenidos lleva tiempo; es necesario tener la idea, darle forma, crear los mensajes principales, escribirla, redactarla, editarla, maquetarla, publicarla y finalmente promocionarla. Y eso no se hace en minutos como es obvio.
• ¿Con qué frecuencia voy a publicar?. Una mayor frecuencia suele traducirse en más tráfico de usuarios, y en un mejor posicionamiento en buscadores (lo que a su vez genera más tráfico).
• ¿Qué extensión van a tener las entradas?. ¿Serán entradas cortas o de una mayor profundidad?. La extensión ideal no está del todo clara, hay opiniones para todos los gustos. Bajo mi punto de vista, la extensión del post tiene una relación directa con el tiempo que le queremos dedicar a nuestro blog, y con su frecuencia de actualización. Dependiendo del caso concreto, y sobre todo de cómo queramos posicionarnos, variará la extensión de cada entrada.
• ¿A quién me dirijo?. Esto está directamente relacionado con el objetivo del blog y con qué quiero conseguir. ¿Escribo para empleadores?, ¿para usuarios en un área específica?, ...
• ¿Cuál será nuestro estilo al escribir?: profesional, informal, ...
• ¿Cómo voy a hacer para promocionar el blog?. Generar contenidos (de calidad) es fundamental, pero no menos importante es su promoción, especialmente cuando uno está empezando.
• ¿Cómo voy a nutrirme para 'inspirarme' y generar nuevas entradas?. Porque la inspiración para publicar no es espontánea ni surge de la nada. Viene porque la buscamos, al realizar un trabajo duro de leer, compartir, opinar en otros foros, conversar, pensar, ...
• Los resultados nunca serán a corto plazo. La marca personal es algo que perdura en el tiempo, que se construye poco a poco. Por lo tanto, la mejor receta para esto será esfuerzo y constancia.
• El contenido ha de ser calidad. La cantidad es buena, pero sin calidad pierde su sentido. En otro post hablaré sobre lo que entiendo por calidad, lo que considero que es muy susceptible a interpretaciones. En cualquier caso, si tu blog tiene un tráfico importante y sostenido en el tiempo, existe interactividad con tu público, y además estás consiguiendo los resultados que te habías propuesto, ¿no es eso contenido de calidad?.

En definitiva, es necesario comprender que tenemos en nuestra mano una herramienta absolutamente única para trasladar al 'mundo' nuestros conocimientos, y que dichos contenidos serán 'permanentes' (podrán ser localizados 'siempre' en Internet) y que podrán ser accedidos por cualquiera, por lo que debemos aceptar que una vez que tomamos la decisión de empezar a escribir y publicar, nos encontramos absolutamente expuestos, con las ventajas y desventajas que ello puede conllevar.

Hasta mañana.