viernes, 22 de junio de 2012

La actitud es clave

Siempre he pensado que la aptitud es muy importante, pero sin la actitud correcta, no vale para nada por sí sola. Una actitud positiva puede multiplicar por 10 los resultados de una persona con una gran aptitud, mientras que una persona con actitud errónea, puede estropear unas buenas dotes y conocimientos.

Estos son los rasgos que para mí definen una actitud sobresaliente:

  • Positivismo. ¿Ven la botella medio llena o medio vacía?. ¿Te has encontrado en alguna ocasión con alguna persona que ante cualquier idea, su reacción automática es negativa y destructiva, poniendo 'palos en las ruedas'?. Da la impresión de ir remando contra-corriente, y eso agota a cualquiera.

  • Innovación. Aporta ideas y mejoras, te hace sentir que existe un sentimiento de equipo de mejora continua.

  • Entusiasmo. Notamos enseguida a las personas entusiastas frente a los apáticos. El que consigue mover la energía hacia donde toca, y además lo hace con ganas e ilusión, tiene una parte del resultado ya conseguido.

  • Proactivos. Pasan a la acción inmediatamente, no esperan a que sus jefes les muevan y les convenzan una y mil veces para hacer las cosas. Se anticipan, lo que les hace minimizar la aparición de problemas y maximizar la generación de oportunidades.

  • Constructivos. Personas que se orientan desde el primer momento a la solución de las problemáticas encontradas, evitando emblucarse en la crítica y la queja.

  • Team players. Personas que se dan cuenta de que el éxito personal es importante, pero que el éxito del equipo / compañía lo es más aún; sin éste no hay futuro posible.

  • Compromiso. Especialmente en tiempos de crisis como los que nos toca vivir actualmente, el compromiso adquiere especial importancia, puesto que sin él no es posible reorientar las organizaciones y mantener su posición en el mercado.

  • Constancia en su actitud, sin sufrir altibajos permanentes.

El disponer de personas en nuestro equipo, con esta actitud, nos trae muchas ventajas:

  • Porque contagian positivamente a su entorno, dinamizándolo con su ejemplo.

  • Porque en estas personas podemos confiar, y eso es algo intangible con un valor incalculable. Saber que puedes confiar en ellos, que les puedes delegar tareas y responsabilidad, que puedes estar tranquilo porque sabes que cuando faltes, ell@s seguirán ayudando a pilotar el barco.

Como responsables de equipo que somos,es vital identificar no sólo a estas personas que sobresalen y que pueden constituirse en líderes naturales, ayudándonos a sacar lo mejor del equipo, sino especialmente a aquellas personas que con su actitud negativa y pasiva, se convierten en potenciales fuente de problemas.

Reflexión:

  • ¿Tienes identificado en tu entorno a aquellas personas con una actitud sobresaliente?


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